Revista de Guitarras

Jordi Gaspar

Jordi Gaspar
Háblanos un poco de tus inicios, como empezaste en la música y concretamente en el bajo.

Pues a los 12 estaba en un conjunto (lo de «banda» no se usaba) en el colegio, tocábamos rock & roll y Beatles con permiso de nuestros papás (y tal). Yo ya me iba a los bordones así que escoger el bajo fue lo natural. Después vino la época del rock sinfónico, a encerrarse en el local todas las tardes, nuestros héroes eran King Crimson, Genesis, Mahavisnu, Led Zeppelin…

¿Qué formación tienes o por el contrario eres autodidacta?

Más adelante fui al AULA y luego al Taller De Musics, donde hice todo lo que se podía hacer entonces y estuve de profe. Pero me considero más autodidacta que otra cosa.

Bajo eléctrico, bajo acústico, contrabajo ¿en función de qué te decides por un instrumento u otro?

Muchas veces la estética del proyecto manda, por ejemplo si el repertorio es Birth Of The Cool pues contrabajo y además sonorizado de una forma determinada. El acústico lo llevo si el volumen de escenario es «unplugged», si no lo es acaba sonando como un eléctrico, y para eso mejor llevar uno. La verdad es que disfruto con los tres y me parecen instrumentos diferentes, lo que suena bien en uno suele no funcionar en el otro…

Acabas de editar tu disco como solista AKIXÍ ¿Qué nos puedes contar sobre él?
AKIXÍ es un palabro que me he inventado juntando «aquí» y «així», es una forma de de decir que aquí estoy y esto es lo que yo soy ahora. Quería tener un repertorio de música que pudiera tocar con el bajo acústico y en el que pudiera plasmar mis cosas, mis visiones, a mi manera. De esta forma, mojándome a tope, me parece más posible conectar.

¿Cómo has enfocado la composición? ¿De que manera desarrollas las ideas?
Pues la cosa es tocar «de verdad». Tal como trabajo ahora se trata de tomar el bajo que sea, poner a tope el nivel de concentración e intentar improvisar/tocar líneas melódicas que tengan sentido para mi. Si no pienso en nada en concreto, surgen músicas relacionadas con mi estado actual, como ocurre en los sueños. Muchas veces funciona pensar en alguien o en alguna situación concreta, eso ayuda a arrancar. Siempre con la ayuda de un grabador (mi zoom H4) y después trabajar con esa materia prima para seleccionar las ideas, colores, climas… y concretar la forma.

¿Qué nos puedes contar de tu equipo?
Tengo dos contrabajos, uno es un «España» de unos 70 años con forma de pera, y el otro es construido por Jaume Albors en 1990, mi preferido. Además tengo un Marco Acoustic Bass (un baby bass), equipado con pick-up Realist, ideal para viajar y en el 80% de los sitios suena mejor que cualquier contrabajo con sus pick-up o micrófonos y con los equipos de sonido con los que uno se encuentra. Y también funciona con el arco.
2 amplis, un SWR400 y un Markbass Acoustic 101. Es un ampli superflexible. Un micrófono AMT 25SB con una pinza adaptable que uso indistintamente con el bajo acústico y el contrabajo, para directo o para grabar. Y una pareja de Shure SM81 para grabar.

Este último disco está grabado con un acústico Takoma ¿Qué bajos tienes y como te amplificas? Efectos etc.
Si, es un Takoma Thunderchief CB105C, venia con cuerdas de bronce B-E-A-D-G y lo cambié a E-A-D-G-C con cuerdas normales, por ejemplo unas Elixir Nanoweb. La mejor forma de amplificarlo es con un par de micros delante como una guitarra española. También queda muy bien con el micrófono AMT de contrabajo. Con el Markbass son pareja ideal.
También tengo un Status fretless 5 str Graphite que usaba con la BB del Taller entre el 88 y el 90 y del cual Tete Montoliu pensaba que era un contrabajo (¡tengo testigos!). Y un Ibanez SR 506. Cualquiera de los dos con Markbass es demoledor. El único efecto que llevo a veces es el octavador BOSS (el de siempre). En general me gusta el sonido desnudo, acústico, así que uso pocos efectos e incluso evito el compresor.

Jordi Gaspar
¿Te llevas bien con la tecnología, lo digital ha aportado algo o prefieres quedarte al margen de todo eso en lo posible?
Que va, me he metido hasta las orejas y estoy feliz de poder experimentar en casa con todo el tiempo por delante. En realidad tengo que vigilarme para no estar demasiado tiempo con la tecnología. Pero esa experiencia te da un criterio para hacerlo mejor cuando vas por ahí, también en las sonorizaciones y en las grabaciones, puedes aportar más y asegurar resultados mejores.

Has grabado tu disco de una forma particularmente curiosa ¿Cómo ha sido el proceso de grabación? ¿Dónde podemos conseguir tu disco?
Sí, la familia de mi mujer tiene una casa en Os Vilares, una aldea de Lugo cerca del nacimiento del río Eo. Esas paredes de piedra y esos pisos de madera de castaño y ese silencio de fondo han sido un entorno fantástico para grabarse. Y luego descubrí el hórreo (ahí habría que añadir las olores a miel, queso y trigo), donde he grabado casi todas las piezas.
Después he mezclado y masterizado con software en mi PC (con los plugin de Waves). Ahí he invertido mucho tiempo, cientos de pruebas, etc.

Intenté que alguna discográfica me sacara el CD. La crisis y la particularidad de la propuesta -solos de bajo- etc. No encontré el entusiasmo que esperaba. Un conocido productor del mundo del jazz me dijo algo así como «Pues lo he escuchado y me gusta, me lo pongo mientras trabajo y en el coche y disfruto. Pero es que esto no es jazz, ni es pop, ni es flamenco, en fin… ¡Es música de autor! No me encaja en ninguna de las líneas de venta, lo siento». Abracé esa definición de inmediato. Eso me empujó a sacar el CD por mi cuenta. Fui haciendo todos los trámites que me sugería SGAE y estoy sacando AKIXÍ con el sello «JUAN PALOMO RECORDS».
El CD está en iTunes (Europa, USA, Canadá, Australia y Japón) y en unas cuantas tiendas más de Internet. Desde mediados de octubre dispondré de los CD físicos que distribuiré por correo a través de la mejor tienda de bajos del mundo, www.doctorbass.net , que tiene Joaquín García en Burgos.

Dada la variedad de fórmulas de distribución de la música en la actualidad ¿cómo ves el panorama?
Creo que las grandes discográficas de antes no se están adaptando a la realidad tecnológica actual. Antes tenían la sartén por el mango y un margen de beneficios que ahora no es posible.
Por otra parte, celebro la flexibilidad y el alcance de la distribución digital. Un CD como el mío no tendría ningún futuro de otra manera, en cambio, ahora es posible que un solo señor en una ciudad remota pueda obtenerlo de inmediato.

Tienes diferentes facetas como bajista, desde sideman jazzero a acompañante de cantantes folk o música popular catalana ¿cómo te divides para todo eso?
Siempre he pensado que cualquier melodía que nos guste puede ser interpretada con mal gusto y destrozarla, y cualquier melodía simple y aparentemente sin gracia alguna puede ser elevada con una interpretación adecuada. Las melodías y los ritmos de la música popular si persisten és porque han funcionado en cualquier caso. Entonces intento pensar en positivo y dar sentido a cada cosa que toco, sea lo que sea, el resultado depende de eso. Lo importante al final es que los que vienen al concierto reciban lo que les cuentas.

Una de improvisación, si te tienes que largar un solo ¿de que manera lo enfocas, conducción melódica sobre los cambios, sigues la melodía, patrones o licks, te dejas llevar a lo que salga…?
Para mi los solos son parte de la música y yo tengo que dar mi opinión más o menos extensa acerca del tema del que estamos conversando. Lo contrario sería hablar de tu libro cada vez que te toca un solo, al final sería siempre el mismo solo y «meando fuera del tiesto». Entonces trato de decir lo que yo siento en contexto a todo lo que está pasando: los cambios, la melodía, el momento de la pieza y del concierto, la actitud de los demás del grupo…; pero siendo yo el que conduce en ese momento.

Si te tuvieras que definir como músico ¿cómo lo harías?
Me gusta pensar que soy persona-músico-bajista en ese orden, y que esa rama no es exclusiva, hay más cosas. No me gusta la palabra mercenario, cuando alguien me pide colaboración quiero pensar que podré aportar todo mi bagaje y no sólo porque necesiten un sampler de contrabajo. Aunque sea una colaboración puntual es una oportunidad para una buena experiencia.

Para acabar ¿Cuáles son tus planes para el futuro, te podremos ver defendiendo tu disco en vivo?
Pues te cuento: Estoy preparando un dueto con el guitarrista Jordi Bonell, con el que espero poder presentar en vivo algunos de estos temas, algunos en solo y otros no y algunos más que estamos cocinando.
Está a punto de salir el CD BLOW, co-producido con Andreu Jacob para Almoukri Records.
También estamos despegando con el trío con Roberto Faenzi (bat. Y perc.) y Mattias Broede (armónica y piano), música propia en un trío de tres.
Y participo en el trío de Ferran Savall, que completa Mario Más. Música popular catalana «revisitada». El CD «Mireu el nostre mar».

Y la última y obligada pregunta ¿qué recomiendas a los que empiezan?
Es muy importante disfrutar con lo que uno hace. Y es imprescindible tocar en grupo, poner en común cosas, la música es un acto social. Y quizá lo más importante es guardar lo que uno es, muchas veces el engranaje educativo anula todo lo que llevó a esa persona a querer estudiar música. Y se trata de todo lo contrario: Todo lo que aprendas tendrá que convivir y estar al servicio de lo que tú seas.

Gracias.
Mil gracias a vosotros…