Revista de Guitarras

¿Qué esconden las guitarras?

Los discos eran nuestros mayores proveedores de información, alguna heroica publicación y alguna estación de radio realizaban también su papel, pero a mi me llegaban especialmente las fotos de los discos y recuerdo en concreto la contraportada del Harvest de Neil Young.

Se podía ver a un joven Neil ensayando con la banda en un granero, con todos los músicos mirándole como si le estuvieran siguiendo o simplemente esperando sus instrucciones, pero por encima de todo estaba esa guitarra de color blanco, esa Gretsch White Falcon como supe posteriormente que era el nombre de ese instrumento, el modelo de que se trataba. Para mí reunía todo el mensaje de Harvest, todas las sensaciones que transmitía esa música giraban alrededor de la guitarra, lírica a veces y punzante en otras.

Evidentemente era totalmente inaccesible para un estudiante de bachillerato, ni siquiera pensaba que podría tenerla. Fender, Gibson o Gretsch eran como tótems inalcanzables para los jóvenes de aquella España. Creo que me daba rabia incluso que Young tocara con su Gibson “Old Black” entonces no tan añeja como lo es ahora, esa Les Paul no entrañaba la magia que yo veía en la Gretsch, que envolvía la música y el estilo de vida que yo soñaba como adolescente para mí.

Muchos años después un modelo similar pasó por casa un buen tiempo, ni de lejos me hizo sentir como cuando soñaba con la guitarra de la foto de la contraportada de Harvest. No soy un tipo de muchas guitarras, si bien es cierto a lo largo de 35 años he tenido la ocasión de probar muchas por cuestiones de trabajo, algunas muy especiales, otras menos, pero siempre he tenido una a mi lado, ya se sabe,las guitarras van y vienen. Curiosamente, si echo de menos alguna es esa que nunca tuve de adolescente, esa Gretsch White Falcon guardaba con ella, pensamientos de un joven tal vez irrepetibles.

Will Martin