Revista de Guitarras

Pensa MK-90

Desde luego no pudo haber tenido un mejor embajador y  la guitarra a su vez no podía tener unas mejores características para la época, se convirtió en el sueño inalcanzable de muchos guitarristas y una de las guitarras más reconocibles de la historia más contemporánea del rock

John Suhr se mudó de Nueva York a Los Ángeles en el 91 donde siguió su propio camino, trabajando en diferentes empresas incluido un paso como Master Builder Senior en la Custom Shop de Fender hasta formar su propia compañía.

A nosotros nos interesa para este artículo Rudy Pensa, la otra parte del binomio. Neoyorkino de ascendencia argentina que desde 1978 en su legendaria tienda Rudy´s Music Soho en Nueva York, ha vendido guitarras a nombres tan importantes de la escena musical mundial como Eric Clapton, Lou Reed, Peter Frampton o Lenny Kravitz.

Su amplio conocimiento del instrumento lo llevó a desarrollar su propia línea de guitarras. Sus instrumentos se sitúan en el segmento más alto del mercado en donde compiten con total eficacia dada su calidad y reconocimiento.

Ya en 1985 y esta vez en colaboración con Mark Knopfler construyó la MK-1 modelo desarrollado bajo las especificaciones del guitarrista británico y que es el referente de la guitarra que vamos a revisar, la Pensa MK-90 en acabado Ice Blue Metallic. Tenemos que agradecer al equipo de Aclam Guitars -su distribuidor- con Jordi Canivell al frente, el habernos facilitado el instrumento para este review y hacerlo todo tan fácil.

CONSTRUCCIÓN, PALA, MÁSTIL

La MK-90 es el modelo exacto que ha estado utilizando Mark Knopfler en los últimos 4 años. Cuando la sacas del estuche destaca inmediatamente el color del acabado Blue Ice Metallic en poliuretano, la guitarra es de construcción atornillada (bolt-on) y se observa el cuidado en los detalles que se derivan de la construcción y los componentes empleados. Se siente ligera, su peso es de 3.6 kg y se adapta al cuerpo con facilidad.

La pala es tipo aleta de tiburón y el color está emparejado con el utilizado para el cuerpo, destacando sobre ella el logo dorado “Pensa” Custom y un binding en Natural. El clavijero es también dorado como el resto del hardware de la guitarra y es un Hipshot Grip Lock Closed, propone un recorrido importante para mayor precisión en la afinación.

La cejuela es de hueso y su longitud es de 1-5/8”. La longitud de escala es 25.5”, la empleada habitualmente en instrumentos tipo Fender.

Presenta un mástil de arce, en acabado natural y su perfil es compuesto, es decir, en la parte donde se sitúa el traste 1 muestra una forma en “V” suave y mientras en el traste 12 es en “C”. La idea es adecuarse mejor a la zona en donde se tocan acordes abiertos y por otro lado a la parte más alta donde se suele solear. Es confortable y la mano se desplaza con facilidad por él, comodidad que se acentúa con el añadido de un pronunciado cutaway inferior en el cuerpo, que te deja alcanzar el final del diapasón sin esfuerzo.

Y ya que nombramos el diapasón, este es de palorrosa East Indian con un radio de 12”, alberga 22 trastes Dunlop 6105 y unos marcadores de posición “dots” situados en los lugares habituales.

CUERPO, ELECTRÓNICA

El mástil se une al cuerpo de manera atornillada, con cuatro tornillos que atraviesan un neckplate dorado. La guitarra se siente muy estable y este tipo de unión genera un mayor sustain en el instrumento, a diferencia de la creencia popular que asocia el sustain al neck-through-body, a la vez que refleja mejor el ataque al tocar.

El cuerpo de la MK-2 es de fresno ligero y cutaway asimétrico en la forma, con la parte superior tallada y rebajes ergonómicos en parte posterior, para una mejor adaptabilidad al cuerpo al tocar de pie. Presenta un binding de arce entre la parte frontal y los laterales, por lo demás es bastante austera en ornamentación a excepción de los botones para los potenciómetros de volumen y tono -que son  Q-Parts Blue Crystal on Dome Knob – este último con push/pull y que muestran un cristal de azul intenso, “Blue Catseye”.

Y hablando de pastillas, la MK-90 como su nombre indica incluye dos pastillas P-90 Lindy Fralin Soapbar con la tapa crema. Los imanes de las mismas son de Alnico 5, están fabricadas en USA con componentes USA, deben ser hum-cancelling porque son totalmente silenciosas.

Son muy versátiles tonalmente y destaca el equilibrio que alcanzan entre unos medios gruesos y el brillo de los agudos. Las pastillas se seleccionan con un selector tipo “cuchillo” de tres posiciones.

El puente es Hipshot Tremolo con dos pivotes de anclaje y cuerdas a través del cuerpo para incrementar el sustain, se acciona con suavidad y se puede ajustar la tensión de la palanca.

SONIDO, CONCLUSIONES

La Pensa MK-90 es una guitarra top level, si quieres salirte de la tiranía de las marcas de siempre y tener una voz propia con versatilidad en un instrumento que se toca con suma comodidad aquí tienes una opción ganadora. La guitarra suena con la dinámica de una guitarra con single-coils, limpia y articulada, con unas sonoridades robustas, una buena dosis de medios y agudos brillantes pero no chillones y con un buen balance entre pastillas. Tocándola con saturación puede empujar de manera importante siempre manteniendo la definición. Aunque tiene un precio alto, vale cada uno de los euros que cuesta.

Os dejamos con un video que hemos grabado para argumentar el review.

Sandra Villora Arenas

Pensa

MK-90

Swamp Ash

Arce

Palorrosa East Indian

22 Dunlop 6150

Hueso

Hipshot Tremolo

Dorado

Hipshot Griplock Closed

Lindy Fralin P-90 Soapbar

Volumen y Tono (push/pull)

Lateral

Blue Ice Metallic

Aclam Guitars

 

0 comentarios en Pensa MK-90

Deja tu comentario